En resumen, el método de Yoga IYENGAR® se define como diferente de otros estilos de Yoga por tres elementos claves, a saber, técnica, secuencia y tiempo de permanencia en las posturas.
Técnica significa que en la práctica se aprenden incluso los más finos ajustes en el alineamiento sobre como cada uno ejecuta sus asanas y el pranayama.
Secuencia se refiere a las secuencias en las que se practican asanas y pranayama. Por ejemplo, variando qué postura se practica después de otra determinada, los efectos mentales y emocionales de la práctica pueden intensificarse de un modo no posible de ninguna otra manera y ocasionar cambios al ser completo, incluyendo la evolución espiritual.
Cronometraje se refiere a la duración del tiempo pasado en las posturas o pranayama. Las posturas no se pueden ejecutar con rapidez o sin percepción consciente. Lleva tiempo moverse a una postura y estabilizarse en ella. Cuando se ha conseguido, entonces se permanece estable durante algún tiempo para intensificar la profundidad de la postura y extraer así su beneficio. De otra manera sus efectos potenciales y sus beneficios quedarían pequeños comparados con lo que es posible.
De esta manera se puede empezar a ver cómo el yoga IYENGAR® cultiva las 8 disciplinas y está lejos de ser simplemente “gimnasia y respiración profunda.” Con la práctica y el entendimiento uno se da cuenta de que Asana (postura) es tan diferente de estiramiento o gimnasia tanto como Pranayama (control de la respiración) es diferente de únicamente respiración profunda y meditación es diferente de trance auto-inducido.
La práctica prolongada de asana y pranayama afecta al individuo en un nivel orgánico (fisiológico), mental y espiritual además del simplemente físico.
* Traducción del texto original en inglés: http://www.iyengar-yoga.com/iyengaryoga/